jueves, 27 de enero de 2011

Nuevos empleos!!!

-"A cinco del nueve"
-"A siete del doceee"
-"A cinco del cuatro,¿me das pa'l chesco?, es que ya me voy. ¡Gracias carnalito, nos vemos!"
-"A diez del diecinueve, ya lo quemó el seis"
-¿Te lo perfumo?, ¡sobres! -el aroma a fresa con vainilla inunda el ambiente hasta dejarte sin poder oler algo más- "¡listo carnal!, ¿de regreso lo de mi chesco?, ¡sale!" -Al bajar  le da una palmada al micro, consintiéndolo.

Requemados por el sol, poco a poco han ido perdiendo su color natural. El bronceado le favorece a unos, a otros sólo los pinta pues la gorra o la visera le impide a los rayos del sol hacer su trabajo. Parece que no hay edad, ni género para su oficio pues vemos desde ancianos hasta niños indicando los tiempos. Sin duda son los "checadores del transporte público de la nueva década".

En Puebla, se agolpan en las paradas más usadas por los pasajeros. A gritos desarrollan su trabajo con cierta habilidad que asombra hasta al más indiferente: gritos, gritos y más gritos a veces acompañados de escenas cirquenses entre maromas y escapes suicidas entre micros o combis.  Si uno se asoma a su libreta de apuntes se encuentra con una rústica base de datos muy bien organizada. Simplemente, capturistas de datos a lápiz y papel.

¿Quién los ha puesto en esa labor? Por lo menos no forman parte de las estadísticas del desempleo, pero tampoco están en la lista del Imss, Infonavit o  de algún ahorro para el retiro. Liberados de pagar impuestos, aunque no sabemos si es un oficio que convenga, llegan puntuales a su trabajo, ¡claro, la puntualidad es su materia!. Desconocemos si doblan turno, si llegan solos, si eligen la ruta a aseguir o alguien se las asigna. Sólo son parte de las nuevas estadísticas, de aquellas que no se ven, que sólo notamos cuando forman parte de la nota roja. Ellos vieron una oportunidad laboral y la aceptaron con todo y sus riesgos. Les importan poco las noticias sobre que ha bajado el desempleo pues ellos ya encontraron un motivo para levantarse de la cama y dejar de encerrar avisos oportunos.

El cielo deja ver las decenas de luces parpadeantes que se confunden con aquéllas fijas en un farol. La joven se despide del chofer del Perimetral 3 con un movimiento de mano y una sonrisa cautivadora. El chofer, desde su ventanilla le pregunta: ¿Y tu amiga? Ella, sonríe y alza los hombros en señal de duda. Él, mueve la cabeza negando y se despide diciéndole: "Te vas con cuidado." Cierra la ventanilla y le comenta a su copiloto: "es que siempre está solita."

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